Niñita
lunes, 10 de septiembre de 2007
(14:55)
"No seas niñita -decía mi padre-, no llores, hacete hombre", nunca lo tome en cuenta. Desde chico que fui un llorón, al principio era solo por caidas jugando en un parque, después estas cambiaron de lugar.
Desde pequeño fui muy torpe con los deportes y los juegos, corría y me caía cada dos metros, sangraba, lloraba y se me pasaba, no duraba mucho, después ni me acordaba. A medida que fui creciendo y dandome cuenta de las cosas mi sensibilidad mutó, el dolor físico ya no era motivo de llanto. El corazón empezó a ser el torpe; se caía, se golpeaba, lo golpeaban; pero el si que era niñita, porque no se le pasaba nunca el dolor, es más, hay algunas caídas y algunos golpes recibidos de los que aun no se recupera.
Ojalá ubiera un hospital para esto, que curé heridas y que te reponga de las palizas que te propina la vida, a ver si asi dejas de llorar algun día Nicolás.
Nicolás Rojas
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